RH no tiene que saberlo todo:Actualizarse es abrirse a nuevas alianzas, no cargar con nuevas exigencias
Por Mónica Lisette Rayas Ortiz
| Mtra. en Derecho Comercial y de la Empresa |
| Consultora de Negocios en Bucle® |
| Especialista en Propiedad Intelectual |
| Psicoanalista individual y de grupos |
Uno de los errores más comunes al hablar de actualización en Recursos Humanos es pensar que significa saber de todo, hacer de todo y resolver todo.
Y eso no solo es falso.
Es peligroso.
Porque genera sobrecarga, frustración e ineficiencia.
El área de RH nació como respuesta a la complejidad creciente en las empresas:
Para organizar, proteger y dar estructura a la gestión de personas.
Pero en su evolución, no puede perder su foco tratando de abarcar disciplinas que requieren especialización profunda.
Actualizarse no es convertirse en experta en psicoterapia, diseño de servicios, cultura organizacional, derecho laboral y gestión del cambio.
Actualizarse es saber que existen esas disciplinas…
y aprender a integrarlas desde alianzas estratégicas.
RH como articulador, no como ejecutor de todo
El verdadero valor del área de Recursos Humanos hoy está en su capacidad para:
Detectar necesidades emergentes en las personas y en la cultura.
Traducir esas necesidades en acciones concretas.
Reconocer cuándo algo rebasa su campo de actuación.
Saber con quién contar para actuar con profundidad, sin improvisar.
En lugar de pretender saberlo todo, un RH actualizado sabe con quién trabajar.
Y ahí es donde consultorías externas especializadas como bucle se convierten en aliados clave.
¿Qué aporta una alianza estratégica con especialistas como bucle?
Diagnósticos culturales con mirada simbólica, emocional y legal.
Diseño de servicios internos que mejoran la experiencia del equipo.
Formación que une lo técnico con lo emocional, y lo estratégico con lo vivencial.
Acompañamiento psicoemocional profesional con el programa PROMENTAL.
Estructura legal para proteger cultura, marca y procesos desde lo intangible.
Esto permite que RH no abandone su función operativa, sino que la sostenga mejor:
Sin tener que improvisar respuestas clínicas.
Sin tener que diseñar experiencias formativas sin método.
Sin tener que traducir sola lo que la cultura ya no sostiene.
Sin cargar con la salud emocional de toda la organización.
¿Por qué esto no es tercerizar, sino especializar?
Porque no se trata de “delegar todo lo difícil”.
Se trata de distinguir lo que te corresponde… de lo que necesita otra mirada.
Así como un área legal contrata despachos externos para litigios especializados,
RH puede y debe contar con consultores que fortalezcan su labor sin desplazarla.
Esto, lejos de quitarle valor a RH, le da más poder de decisión, más claridad y más herramientas.
Conclusión: liderar no es saber todo. Es saber a quién sumar
El área de Recursos Humanos no necesita convertirse en una enciclopedia humana.
Necesita convertirse en un centro de articulación inteligente, sensible y estratégico.
Y eso solo es posible cuando reconoce sus límites, honra su rol y construye redes de colaboración con especialistas externos que complementan, fortalecen y dignifican su función.
En bucle, entendemos ese rol.
Y por eso diseñamos cada servicio, capacitación y acompañamiento como una forma de cuidar a las personas…
sin que RH tenga que cargar con todo.
Porque actualizarse no es acumular más funciones.
Es hacer espacio para nuevas alianzas.